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La lucha entre McLaren y Alpine por el cuarto lugar en el Mundial de Constructores de F1 se encendió otra vez tras Singapur.

Después del Gran Premio de Países Bajos, la marca francesa tenía ventaja de 24 puntos sobre la casa de Woking, con una racha de once carreras consecutivas en la zona de puntos de por medio.

Sin embargo, la consistencia de Lando Norris, quien sumaba un sexto y cinco séptimos puestos en las siete ultimas carreras dejaba latente la posibilidad de que la tendencia se revirtiera en cualquier momento.

Esto ocurrió en Singapur, donde el británico acabó cuarto y Daniel Ricciardo quinto, siendo su mejor resultado de la campaña. En contraste, Fernando Alonso y Esteban Ocon abandonaron por fallas de motor.

Considerando que Norris fue séptimo en Italia mientras Ocon acabó undécimo y Alonso abandonó, le permite a McLaren dirigirse a Japón con cuatro unidades de ventaja ante Alpine, en lo que se considerará una “guerra abierta” en esta parte final del Mundial.

"Daniel y Lando han tenido pilotajes excelentes en condiciones complicadas", destacó Andreas Seidl, jefe del equipo. "No pusieron mal una rueda en un día en que muchos de sus compañeros fallaron, pero igualmente se beneficiaron del gran trabajo en equipo y la comunicación clara de sus estrategas, ingenieros y el equipo de fosos, que una vez más cumplieron".

"Tomamos las decisiones correctas hoy cuando era muy complicado juzgar el mejor curso de acción. Si bien estábamos en una posición buena desde el principio de la carrera, en estas condiciones y particularmente en esta pista, siempre es tentador saltar temprano, cambiar a los slicks e intentar agarrar aún más".

"Tuvimos paciencia, dos autos confiables y paradas en fosos sólidas, todos los cuales fueron factores cruciales en el resultado".

El resultado destacó en maneras similares para cada piloto: Norris, con la actualización más reciente en el MCL36, sostuvo luchas múltiples en la competencia, rebasando a Alonso en el arranque, manteniendo a raya a Max Verstappen, quien acabó cometiendo un error, y manteniendo un ritmo similar al de Carlos Sainz II.

Mientras tanto, Ricciardo remontó desde la 16º casilla en una prueba de supervivencia para la mitad de grupo. Después de rebasar a tres autos en el comienzo, el australiano se benefició del abandono de Alonso y el golpe de Hamilton al muro para el momento de la ronda de detenciones.

Al extender su primer turno, los dos se beneficiaron del accidente de Yuki Tsunoda para hacer su cambio de llantas durante el periodo de Auto de Seguridad. De hecho, Ricciardo fue el gran ganador al avanzar de décimo a quinto para el sprint final.

Al admitir que el desempeño de sus autos ha variado mucho, en comparación con Alpine, Seidl anticipa que el resultado de la contienda por el cuarto puesto durará hasta el final de año.

"Alpine obviamente tuvo un gran fin de semana en Spa donde tuvimos muchos problemas. Y por otro lado, tuvimos la oportunidad de hacer lo mismo hoy mientras ellos tenían problemas", indicó. "Entonces, creo que es simplemente una batalla abierta. Creo que también está muy cercan en términos de rendimiento".

"No nos dejamos llevar por el resultado de hoy. Sabemos que la batalla en la que estamos contra los Alpine en el Campeonato de Constructores es muy dura y por eso somos plenamente conscientes de que esta batalla puede durar hasta la última vuelta en Abu Dabi".