Pensá en verde
Juan Bautista DeBenedictis ganó un carrerón en Rosario. La final fue especial, con paradas en boxes. Agustín Canapino abandonó, pero sigue liderando el campeonato.
Es que le salió muy bien a la categoría espectáculo la apuesta de correr solo una final a 64 vueltas o 70 minutos como máximo, donde los pilotos pudieron hacer una recarga de combustible y recambio de gomas. La variante no era obligatoria, pero considerando el desgaste de los neumáticos y el consumo de combustible, fue muy fino el planteo para quienes optaron por no entrar a los boxes.
A pesar de una nueva y previsible pole positions de Agustín Canapino, el hombre a vencer en la especialidad, en la carrera pasaron cosas que nadie esperaba. Primero que el propio Canapino, luego de su parada, se despistó y después abandonó por la rotura de los dos espárragos en la suspensión delantera izquierda. Sin embargo, a pesar de su percance, el Titán sigue liderando el torneo.
El golpe de escena del quíntuple campeón tuvo su secuela cuando Johnnito DeBenedictis también se despistó perdiendo el liderazgo parcial. Nicolás Cotignola heredó la punta que defendió a pleno en una dura lucha con su compañero de equipo, Ricardo Risatti. Los pilotos del Sprint Racing fueron juntos hasta el final cuando su estrategia de no cambiar las gomas les jugó una mala pasada. Caito se retrasó, Nico hizo lo que pudo y en la última vuelta perdió ante DeBenedictis y Matías Rodríguez. Ambos le dieron un repentino 1-2 al Sportteam y Cotignola se conformó con ser tercero.
“La viví muy tensionado ya que no tenía claro quién había ingresado a cambiar las gomas y recargar nafta. Sobre el final pude pasarlo a Cotignola. Gané la carrera soñada. Cambié dos neumáticos y lo hicimos rápido. Mérito para el Sportteam que demostró por qué es el equipo más ganador”, dijo DeBenedictis. “Fue un carrerón. Cambiamos dos gomas. Salí con una estrategia de cuidar mucho y estuve cerca de que me saliera bien y ganar”, dijo Rodríguez. En tanto que Cotignola admitió que “apostamos a una estrategia de no cambiar gomas. Casi nos sale. Pero en el final me enredé mucho y terminé casi con las telas en el caucho”.
Gracias al Top Race que se la jugó por una carrera diferente, más extensa y que fue muy positiva. Lo propio los pilotos que se adaptaron el cambio y brindaron un gran espectáculo. Gracias totales.
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